Horario: Es fundamental contar con un horario de estudio, una cantidad de horas de estudio a la semana:
Es bueno que este horario considere varios días de la semana, evitando concentrar los estudios en uno o dos días de manera intensiva
Las tandas de estudios no debieran durar más de 2 horas continuas, si se desea estudiar más horas diarias, estas deben estar separadas por actividades que permitan desconcentrarse y volver a retomar los estudios, esto permite refrescar la mente para evitar el agobio.
Las primeras horas de la mañana son las que permiten una mejor comprensión y concentración, por ello es recomendable utilizar estas horas para sentarse a estudiar, sin embargo, es muy importante adaptarse a las preferencias de cada niño y procurar concordar con él en el horario que le permita tranquilidad y concentración, pero evita aquellos horarios en que sabes que existe mayor probabilidad de interrupciones o distracciones (llegada del resto de la familia, programas de TV favoritos, etc.)
Lugar de estudio:
No es necesario que sea una habitación especialmente preparada para ello (aunque si los medios permiten hacerlo es recomendable), basta con que sea un lugar que permita concentrarse evitando los distractores comunes de una casa tales como la televisión, gente jugando o conversando en voz alta, si se utiliza música debe ser con el objetivo que ayude en el estudio. El dormitorio, una sala de juegos, el patio al aire libre, pueden ser buenos lugares para estudiar siempre y cuando no signifiquen distracción, pero es necesario tener definido un lugar o lugares donde tu hijo pueda estudiar. A algunos les resulta muy bien la formalidad de estar sentado cómodamente frente a un escritorio donde dispongan de los elementos necesarios para el estudio, no obstante, dependiendo de la edad de tu hijo puede ser hasta más recomendable presentar un ambiente un poco más distendido, pero pensando siempre en que debe ser un espacio para aprender.
La comodidad es un factor muy importante para lograr un estado de agrado en los estudios, por ello dale importancia a una buena silla, un escritorio de tamaño adecuado, si vas a usar notebook, puedes hacerte de un alzador que le permita a tu hijo una postura ergonómica cuando lo esté usando, además de ello, en lo posible disponer de apoyos necesarios para el estudio, tales como; pizarra, mapamundi, atlas, y otros elementos de acuerdo a la edad de tu hijo. Respecto a la iluminación, siempre se recomienda la luz natural, un lugar cerca de una ventana o definitivamente al aire libre.
Hábitos
Trata de desarrollar hábitos de lectura en tu hijo. Este hábito permite desarrollar la comprensión lectora y produce acercamiento con la investigación en general y con el gusto por aprender (este punto se refiere a la lectura directa en papel y no a una Tablet, teléfono o computador, ya que, a muchas personas, la lectura impresa le produce una sensación de agrado que no logra la lectura digital), para lograr esto se puede considerar inscribirse en una biblioteca y que el alumno tenga la costumbre de solicitar libros de su gusto. Es importante que la familia entera comprenda la necesidad de respetar los horarios de estudios del niño(a), si existe la costumbre de modificar estos horarios el niño nunca desarrollará hábitos de estudio y, por tanto, no le dará la importancia que requiere esta rutina.
Refuerzos:
Refuerza lo que vaya aprendiendo a través de preguntas cotidianas o pidiéndole que te cuente cómo funciona algo que sepas que está estudiando (fotosíntesis, células, pedirle que te haga algún cálculo, el universo, algún episodio de la historia, etc.).
Planificar actividades complementarias que sirvan para el desarrollo del alumno, tales como:
1) Paseos al campo con trabajos de observación que después puedan ser explicados por el alumno.
2) Trabajos de investigación y laboratorios (se pueden incluir documentales que expliquen algunas de las materias abordadas)
3) Museos y Zoológicos
4) Exposiciones culturales
5) Inscripción en la biblioteca municipal para pedir periódicamente libros y mantener una rutina de lectura diaria (a lo menos 15 minutos), lograr este punto asegura una rutina de aprendizaje para el alumno de una manera que no sea abrumadora